Dzogchen

¿Que es el Dzogchen?

La naturaleza de las diferentes cosas es no dual, más cada una, en su propio estado, está más allá de los límites de la mente. De la condición "como es" no existe concepto, pero la visión se manifiesta: todo está bien. Todo está cumplido, y así superada la enfermedad del esfuerzo, nos encontramos en el estado de auto-perfección: Esta es la contemplación. Dzogchen es una antigua enseñanza espiritual desarrollada en el Tíbet dentro de la tradición budista tibetana. No pertenece a una escuela o sistema religioso. Más bien, es el conocimiento que maestros tibetanos han transmitido sin estar limitado por el sectarismo. La palabra ' Dzogchen', que significa " la perfección total", en realidad se refiere a la verdadera naturaleza inherente de todos los seres, su estado primordial, que está libre de todas las limitaciones y condicionamientos. La transmisión del maestro de este estado del conocimiento se encuentra en el corazón mismo de las enseñanzas Dzogchen. La tradición Dzogchen se ha transmitido de maestro a discípulo en un linaje ininterrumpido a lo largo de los siglos, hasta nuestros días. Debido a su enfoque directo y sencillo, trasciende límites culturales por lo que es accesible a todas las nacionalidades por igual, independientemente de su origen espiritual. Las enseñanzas Dzogchen se dividen en tres series: Semdé, Longdé y Mennagdé. Las tres series son tres maneras de presentar la enseñanza, cada una con sus correspondientes métodos de práctica. El objetivo de las tres, sin embargo, es llevar al practicante a la realización. En el Semdé, la " serie de la mente", el practicante es introducido a la naturaleza de la mente con el fin de tener una experiencia real de la misma. Longdé significa la "serie del espacio": en este caso, el espacio se refiere a la dimensión primordial de la nada, que sirve como base para la manifestación de la claridad del practicante, y para el desarrollo de su comprensión. Mennagdé, la serie esencial de "instrucciones secretas" o Upadesha, comprende enseñanzas especiales y métodos basados en las experiencias de los maestros, con el objetivo de ayudar al progreso del practicante hasta completar la realización. El maestro Savari sostiene: Puesto que la mente ordinaria es la simplicidad natural, no la manipules con elaboraciones conceptuales. La pura naturaleza de la mente no necesita cambio alguno. Permite, pues, que la mente permanezca en su estado natural sin tratar de adherirte a ella ni de trascenderla. Milarepa (gran Yogui del Tíbet) proclama: Habiendo permanecido continuamente en la mente ordinaria he olvidado la ilusión de la ignorancia. Abundando en lo anterior, El rey creador de todos los fenómenos, un tantra-raíz del dzogchen ofrece los siguientes diez puntos, denominados técnicamente las "diez ausencias" (med pa cu): 1. No hay visión en la que meditar 2. No hay ningún compromiso (samaya) que respetar 3. No hay una determinada cualidad espiritual que desarrollar 4. No hay mándala que crear 5. No hay ninguna iniciación que recibir 6. No hay sendero que seguir 7. No hay niveles de realización (o bhumis) que recorrer 8. No hay ninguna conducta específica que se deba adoptar o abandonar 9. Desde el sin principio la sabiduría natural permanece libre de obstáculos 10. La perfección espontánea está más allá de la esperanza y el temor. "La confianza irreversible proviene del reconocimiento y seguridad de la presencia de la base fundamental. Con el desarrollo de la confianza dejan de distraernos la pereza, las desilusiones, la tristeza, el entusiasmo, etc. No sucumbimos ante la ignorancia o la agresión, el apego, el egoísmo o  las tendencias habituales tales como la irritación, los celos o la provocación. Al reconocer la esencia básica de la iluminación en nuestro interior, apreciamos el gran valor de nuestra existencia."  S.E Khandro Rinpoche en su libro "Esta preciosa vida".