Teniendo en cuenta los terremotos, la actividad
volcánica y los climas extremos que hemos estado experimentando en
los últimos años, es difícil que no vengan a la mente pensamientos
apocalípticos y que se especule sobre un eventual final de nuestra raza.
Es bastante sugestivo que muchas culturas y
civilizaciones antiguas hayan profetizado sobre nuestra era actual y su
significancia para la historia humana en su totalidad.
Estas visiones de futuro predicen que estos tiempos
que vivimos serán períodos de grandes y profundas transformaciones para nuestra
historia como raza.
Pero ¿por qué el año 2012 está siempre relacionado
con el fin del mundo? Pues existen varias líneas de pensamiento que
parecen converger en el fin del mundo 2012 y en la finalización de
nuestro tiempo en el planeta.
Alineación cósmica
En primer lugar, es en el año 2012 cuando el
decimotercer Baktún del extenso calendario Maya llega a su fin, más
precisamente, el 21 de diciembre de ese año (en coincidencia con el solsticio
de invierno). Este calendario de trece baktunes comienza el 12 de agosto del
3.114 A.C. y su duración corresponde a 1/5 de una precesión, es decir, un
período de 26.000 años.
John Major Jenkins descubrió que en el 2012 se producirá un alineamiento
de la Tierra con el centro mismo de nuestra galaxia. En consecuencia,
después de 26.000 años estaríamos completando un ciclo, y nos realinearíamos
con el centro de la Vía Láctea. Como se ve, un hecho que no pasa desapercibido.
El Sol se vuelve en contra nuestro
En segundo lugar, varios datos científicos
astronómicos y geológicos parecen apuntar al 2012 como una época
convulsionada para nuestro vecindario espacial. Así por ejemplo, se esperan
períodos de gran actividad solar, de un aumento del magnetismo que
genera esta estrella e incluso una posible inversión de sus polos. Siendo
que dependemos tanto del Sol, sin duda que los cambios en nuestro planeta se
harán notorios muy pronto, provocando la inversión geomagnética terrestre
predicha por algunos científicos.
Los Cambios ya son visibles!
Algunos de los cambios actuales, afirman algunos, ya
son una señal de todos estos fenómenos. Este grupo de personas opina que el
cambio climático global experimentado en las últimas décadas obedece no
únicamente a la actividad humana contaminante, sino a alteraciones de la
actividad solar habitual.
Muchos de los fenómenos esperados, como se ve,
dependen del Sol. Nuestra estrella tiene una vida mucho más larga que nuestro
planeta, y como parte de su ciclo experimenta fluctuaciones periódicas de su
actividad. Lo que sucede es que no siempre ha existido una civilización como la
nuestra para registrarlo y observar sus efectos. Por esta razón es que la
ciencia no está muy segura aún sobre qué esperar en un futuro próximo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario