A continuación expondré algunas razones para que podamos entender por qué hoy es el primer día del resto de nuestra vida.
Primera razón: Decisión personal
Cada día las personas edificamos los cimientos de lo que es nuestro presente, pero también de lo que será nuestro futuro. La vida no se nos ha dado hecha sino que precisamente la hacemos día a día. Cada persona es el inventor de su propia, única y singular existencia. Tenemos que tener claro que el individuo no es, ni más ni menos, que el constructor de su propia vida o destino personal.
Segunda razón: Responsabilidad social
La vida constituye una irrenunciable responsabilidad frente a uno mismo y los demás. Cada persona debe aprender a ser responsable de su propia vida. Debemos aprender que lo que podemos ser o tener dependerá siempre de lo que hoy mismo hacemos o dejemos de hacer. A este poderoso hábito le llamamos proactividad.
Tercera razón: Personalidad individual
Nuestra vida es una oportunidad única que no volverá a repetirse. Solamente seremos los actores principales de la película que rodamos en nuestra propia vida real. Recordando a Aristóteles, las personas deberíamos ser definidas no por lo que somos en un momento dado, sino por nuestro potencial y lo que podríamos llegar a ser.
Cuarta razón: Respeto a uno mismo
La vida debemos considerarla como el bien más valioso y hermoso que el ser humano recibe. ¿Debemos dejar nuestra vida libre al destino, azar o casualidad?
Quinta razón: Afirmación de uno mismo
Si no podemos planificar nuestra propia vida por nuestros medios, seguramente otros podrán hacerlo. ¿Pero lo harán para obtener alguna ventaja? Tenemos que tener claro que somos nosotros los que debemos encauzar nuestra vida porque somos los que realmente conocemos lo que nos conviene.
Sexta razón: Motivación de logros
La imagen que tiene una persona de sí misma no siempre armoniza con la imagen real de lo que es o de lo que quiere llegar a ser. Probablemente exista una brecha entre lo que en verdad se es y lo que se quiere llegar a ser. La planificación de la vida nos ayuda poderosamente a convertirnos en quien aspiramos llegar a ser. Uno de los factores de éxito más importante es contar con objetivos en la vida.
Séptima razón: Oportunidad de realización
Cada persona sólo tiene un tiempo en la vida para realizarse. Este tiempo está limitado por la naturaleza orgánica del individuo y por la velocidad de cambio en la sociedad mundial. Tenemos la obligación de aprovechar nuestra oportunidad.
Para concluir, me gustaría añadir algo más: es básico que tengamos visión de futuro y que seamos conscientes que cada persona es capitán de la propia nave de su vida.
Aceptémoslo, no podemos hacer nada por nuestro pasado, sin embargo todavía podemos hacer mucho por nuestro futuro.
Primera razón: Decisión personal
Cada día las personas edificamos los cimientos de lo que es nuestro presente, pero también de lo que será nuestro futuro. La vida no se nos ha dado hecha sino que precisamente la hacemos día a día. Cada persona es el inventor de su propia, única y singular existencia. Tenemos que tener claro que el individuo no es, ni más ni menos, que el constructor de su propia vida o destino personal.
Segunda razón: Responsabilidad social
La vida constituye una irrenunciable responsabilidad frente a uno mismo y los demás. Cada persona debe aprender a ser responsable de su propia vida. Debemos aprender que lo que podemos ser o tener dependerá siempre de lo que hoy mismo hacemos o dejemos de hacer. A este poderoso hábito le llamamos proactividad.
Tercera razón: Personalidad individual
Nuestra vida es una oportunidad única que no volverá a repetirse. Solamente seremos los actores principales de la película que rodamos en nuestra propia vida real. Recordando a Aristóteles, las personas deberíamos ser definidas no por lo que somos en un momento dado, sino por nuestro potencial y lo que podríamos llegar a ser.
Cuarta razón: Respeto a uno mismo
La vida debemos considerarla como el bien más valioso y hermoso que el ser humano recibe. ¿Debemos dejar nuestra vida libre al destino, azar o casualidad?
Quinta razón: Afirmación de uno mismo
Si no podemos planificar nuestra propia vida por nuestros medios, seguramente otros podrán hacerlo. ¿Pero lo harán para obtener alguna ventaja? Tenemos que tener claro que somos nosotros los que debemos encauzar nuestra vida porque somos los que realmente conocemos lo que nos conviene.
Sexta razón: Motivación de logros
La imagen que tiene una persona de sí misma no siempre armoniza con la imagen real de lo que es o de lo que quiere llegar a ser. Probablemente exista una brecha entre lo que en verdad se es y lo que se quiere llegar a ser. La planificación de la vida nos ayuda poderosamente a convertirnos en quien aspiramos llegar a ser. Uno de los factores de éxito más importante es contar con objetivos en la vida.
Séptima razón: Oportunidad de realización
Cada persona sólo tiene un tiempo en la vida para realizarse. Este tiempo está limitado por la naturaleza orgánica del individuo y por la velocidad de cambio en la sociedad mundial. Tenemos la obligación de aprovechar nuestra oportunidad.
Para concluir, me gustaría añadir algo más: es básico que tengamos visión de futuro y que seamos conscientes que cada persona es capitán de la propia nave de su vida.
Aceptémoslo, no podemos hacer nada por nuestro pasado, sin embargo todavía podemos hacer mucho por nuestro futuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario